SPM - ¿DE QUÉ TIPO ERES TU?
Alrededor del 20-40% de todas las niñas y mujeres sufren síndrome premenstrual (SPM). Se refiere a muchas molestias psicológicas y físicas que pueden aparecer en las mujeres durante el ciclo menstrual, más concretamente en la segunda mitad, es decir, después de la ovulación y antes de la menstruación. Bajo el término SPM se resumen unos 150 síntomas.
ESTOS SON LOS SÍNTOMAS DEL SÍNDROME PREMENSTRUAL
Los síntomas psicológicos del síndrome premenstrual incluyen
- Irritabilidad
- Estado de ánimo (deprimido)
- Alteraciones del sueño
- Desequilibrio
- Nerviosismo
- Desgana
Y entre otros, los síntomas físicos incluyen:
- Tirón/dolor en el pecho
- Dolor abdominal
- Dolor de cabeza
- Dolor de espalda
- Problemas digestivos
- Piel manchada
- Náuseas
Estos síntomas del síndrome premenstrual pueden dividirse en cuatro tipos diferentes, que se manifiestan de forma distinta en función del equilibrio hormonal:
Tipo SPM | Aumento de los síntomas |
SPM-A Ansiedad | Cambios de humor, ansiedad, nerviosismo, ira, agresividad, irritabilidad |
Ansia de SPM-C | Antojos, dolores de cabeza, fatiga |
SPM-D Depresión | Estado de ánimo depresivo, llanto, insomnio |
SPM-H Hiperhidratación | Retención de líquidos, dolor/tensión en el pecho, aumento de peso |
LOS DIFERENTES TIPOS DE SPM
SPM tipo A: En el SPM tipo A, la "A" no sólo significa ansiedad, sino también descontrol. La responsable es la adrenalina, la hormona del estrés. Ésta se segrega con mayor frecuencia cuando existe un desequilibrio entre estrógenos y progesterona. Concretamente: aumenta el nivel de estrógenos y disminuye el de progesterona. Pero eso no es todo: no sólo se libera más adrenalina, sino que también se produce menos dopamina, la hormona de la felicidad. Esto puede provocar cambios de humor y sentimientos de ansiedad.
Nuestro consejo: largos paseos al aire libre o ejercicios de relajación. El ejercicio regular puede ayudar a reducir el estrés y, al mismo tiempo, tiene un efecto positivo en tu bienestar.
Síndrome premenstrual tipo C: Este tipo se desencadena por un descenso brusco de los niveles de azúcar en sangre en la segunda mitad del ciclo, es decir, después de la ovulación. Desgraciadamente, la solución no es picar más dulces, sino hacer ajustes dietéticos específicos que permitan que el nivel de azúcar en sangre suba más lentamente y que la sensación de saciedad dure más tiempo.
Nuestro consejo: come más legumbres o fruta.
SPM tipo H: Al igual que en el tipo A, el aumento del nivel de estrógenos también desempeña un papel decisivo en el SPM tipo H. El aumento de la liberación de serotonina hace que los vasos sanguíneos sean más permeables y favorece la retención de líquidos. El aumento de la liberación de serotonina hace que los vasos sanguíneos sean más permeables y favorece la retención de líquidos. Además, se favorece la liberación de la hormona aldosterona: esto estrangula la excreción de líquidos en los riñones, lo que conduce a una mayor retención de agua.
Nuestro consejo: Beba, beba y beba. El líquido estimula la actividad renal y, por lo tanto -especialmente en forma de infusiones deshidratantes como la ortiga- se puede reducir la retención de agua en el organismo.
SPM tipo D: Los estados de ánimo depresivos suelen ir acompañados también de sentimientos de ansiedad, aunque la balanza hormonal figurada se inclina en la otra dirección en comparación con el síndrome premenstrual de tipo A: un nivel reducido de estrógenos y un exceso de progesterona. Las causas pueden ser el estrés o una carencia de nutrientes.
Nuestro consejo: sabemos que esta época es dura y que sólo quieres acurrucarte en la cama con las sábanas sobre la cabeza, pero aquí es donde cuidarse es oro e importante. Ya sea un largo baño de burbujas, un sábado en pijama y en el sofá o una ración extra de chocolate. Todo está permitido siempre que te haga sentir bien.
Atención: si los síntomas psicológicos son especialmente graves, consulte a un médico. En este caso, los médicos hablan de trastorno disfórico premenstrual (TDPM). Su frecuencia se estima en un 5-8 %. El bajo estado de ánimo recurrente no sólo afecta enormemente a la calidad de vida, sino que también supone una carga para la vida familiar, el trabajo diario y los contactos sociales. Tómese en serio los síntomas y hable con su médico.
Por último, pero no menos importante: aún no se han aclarado las causas exactas de los síntomas premenstruales. Además del desequilibrio progesterona/estrógenos ya mencionado, existen otras posibles explicaciones:
- un exceso de la hormona prolactina
- una caída brusca de las endorfinas endógenas
- alteraciones de la estructura de las sustancias mensajeras neuronales (por ejemplo, dopamina, serotonina)
A todas las chicas ahí fuera: todas estamos en el mismo barco y sabemos lo estúpido que puede llegar a ser todo esto. Pero por suerte se acaba al cabo de unos días y el sol vuelve a brillar #girlpower.